10/11/08

¿Por qué me has enseñado a pensar...

El texto completo es: "¡Dios!,¿por qué me has infligido un castigo tan terrible como es la capacidad de pensar? ¡¿Por qué me has enseñado a pensar en vez de enseñarme a ser sumiso como un borrego?!"

Esta cita proviene de un intelectual iraní que sufrió la tortura por la policía secreta iraní (la Savak) durante el régimen del segundo Sha Pahlevi. La he encontrado en un libro de Ryszard Kapuściński titulado "El Sha".

Me ha llamado la atención porque saca a la luz la dicotomía existente entre conocimiento y felicidad. Para mi ser feliz es más dificil mientras más conocimientos tengas, como pensar el es medio de acceder al conocimiento y la inteligencia actúa como catalizador, son por ende también trabas a nuestra felicidad.

Para explicarme pondré un ejemplo ¿Quién es más feliz, un borrego o un hombre? Es una pregunta más complicada de lo que parece. No sabemos cual de los dos es más feliz, pero podemos pensar que un borrego que tenga satisfechas sus necesidades básicas (comida, refugio, espacio y pareja) puede estar muy contento, es decir, requiere poco para estarlo, le es fácil. Por otro lado, una persona con las necesidades básicas garantizadas puede estar hastiada por motivos muy diversos, necesita algo más que estos requerimientos mínimos para considerarse feliz, le es más complicado.

¿A qué se debe la diferencia? Creo que es a que el borrego no se plantea su sitiación, no para a pensar "oye, tengo mis necesidades cubiertas pero estoy encerrado" o "puede que mañana ya no las tenga", incluso "esta situación es injusta" o "podríamos estar mejor".

Lo que más llama la atención es que hay personas que dedican su vida a ampliar su conocimiento, tienen una sed insaciable de saberes. Se pueden dar muchas explicaciones para este fenómeno: que son masoquistas, que no se conoce el efecto que tendrá esta forma de vida sobre nuestra felicidad... Me inclino a pensar que se trata de un reto, si con el pensamiento y el conocimiento hacemos más difícil (si se puede) el alcanzar la felicidad, hay que reconocer que cuando llegamos a la meta esta resulta mucho más placentera, nos llena más.

Para terminar me abro un poquito y afirmo que intento pertenecer al grupo de los pensadores, aunque tengo que admitir que a veces me vence la inercia de dejar la mente desocupada.

¿A qué grupo perteneces tú?

4 comentarios:

Anónimo dijo...

A mí lo que más me ha gustado del artículo es el tag que le has puesto: "filosofía (barata)". Buenísimo tío ;)

Ahora hablando en serio, me siento totalmente identificado con la pregunta retórica del iraní...

Al igual que tú, me incluyo en el grupo de los pensadores...para mi desgracia. Al principio pensaba que desde luego era mejor...pero mientras uno va creciendo, se da cuenta de algo tan básico como que tenemos "fecha de caducidad". Lo importante es ser feliz con uno mismo. Una vez se tiene eso, lo demás será mucho más fácil... Pero conseguirlo es inmensamente complicado.

"La vida es eso que pasa, mientras pensamos en otra cosa".

Yo digo:

"La vida es eso que pasa, mientras nos preguntamos qué es la vida"

Otrebla dijo...

"Casi siempre lo mejor de la vida consiste en no hacer nada en absoluto, en pasar el tiempo reflexionando, rumiando todo ello. Quiero decir pongamos que alguien comprende que todo es un absurdo, entonces no puede ser tan absurdo porque uno es consciente de que es un absurdo y la consciencia de ello es lo que le otorga sentido. ¿Me entienden? Es un pesimismo optimista." bukowski

Soy aspirante a pensador y en principio no pienso dejarlo pero cuantitativamente y cualitativamente resulta equivalente desde la perspectiva de cada uno. Es más, a la postre es objetivamente lo mismo.

De todos modos XIII la felicidad está demasiado implícita en esa frase ya que ha renunciado a ella desde el principio, no tiene derecho a ella y lo sabe desde el momento en que se asume pensador.

XIII dijo...

Gracias por vuestras aportaciones, como siempre son muy ilustrativas.

Quiero dejar claro que NO estoy en el grupo de los pensadores, estoy en una situación intermedia, una montaña rusa que sube y, cuando parece que vas a tocar el cielo, desciende en picadoo hacia la facilidad y felicidad de la evasión y el encefalograma plano; y vuelta a subir.

Siempre me he tenido la sensación de que los porqué vitales importan menos que los cómo.

La cita de Bukowski parece sacada de "El Gran Lebowski". Yo contesto a esta afirmación con una cita no literal. Cuando te das cuenta del absurdo de la vida te quedan dos opciones, deprimirte o reirte del chiste, Alan Moore.

¿El pensador sabe y se resigna a no alcanzar la felicidad? No creo que ocurra desde el principio, llega un momento en que te das cuenta, pero has andado demasiado para volver atrás. Es un caso interesante el de "Cifra" un personaje de Matrix que repudia su conocimiento y quiere volver al borreguismo, si le borrasen la memoria, ¿intentaría pensar?

Anónimo dijo...

Desde luego que pensaría...estamos "predestinados"...¿o no?