18/11/08

Aprendiendo a luchar

Este fin de semana se han movilizado en Roma más de 200000 estudiantes contra el Real Decreto 133/2008, que es conocido por el nombre de la ministra que lo ha promovido: "Ley Gelmini".
A través de ésta, se pretende reformar íntegramente la enseñanza. A nivel superior, la reforma pretende adaptar la universidad italiana al llamado proceso de Bolonia, con todas las consecuencias que tan bien conocemos. Sin embargo, en Italia, la ley de reforma universitaria no viene disimulada y muestra desde el principio las consecuencias de las transformaciones estructurales que se van a producir en nuestras universidades en pocos años. De esta forma, para el año que viene, se han reducido los fondos para las universidades públicas (no así para las privadas que reciben subvenciones del gobierno), se recortan las plazas de investigación, subordinando gran parte de ésta a la existencia de financiación privada. Las tasas van a aumentarse de forma sustancial (en algunas licienciaturas en más de un 40 por ciento), sin que la estructura de becas se vea alterada. Por último, la autonomía universitaria se ve cercenada por la aparición en escena de presencia empresarial ajena a la univesidad en algunos órganos de gobierno de la misma.
Pero esta ley no afecta sólo a la enseñanza superior. La enseñanza primaria y secundaria ve también sus presupuestos reducidos. Además, en pos de una formación adaptada a los nuevos tiempos, se han sustituido los profesores especialistas en primaria y secundaria por lo que aqui se conoce como el maestro único para todas las materias. Berlusconi tiene claro lo que quiere, mano de obra descualificada, carne de precariedad.

Ante esta situación casi extrema, y movidos por la chulería con la que la derecha hace uso del gobierno en Italia, estudiantes, maestros, profesores (de secundaria y universitarios) e investigadores han salido a la calle. Llevan dos meses protestando casi a diario. En mi ciudad, Bolonia, los estudiantes con la connivencia de profesores y órganos de gobierno de la universidad han ocupado la mitad de las facultades. Esta acción ha sido una constante a lo largo y ancho de todo el país.
Para este fin de semana se convocó una manifestación en Roma de todos los estudiantes. Se fletaron trenes para que pudiéramos ir todos a un precio muy bajo, y se ocupó la mayor universidad del país: La Sapienza. Allí hemos dormido los estudiantes de fuera de Roma este último fin de semana. Los pocos erasmus allí presentes hemos tenido la sensación de estar viviendo un segundo mayo de vino y rosas. La comunidad Universitaria ha demostrado aquí en Italia que tiene un gran poder como fuerza social y política. Durante un fin de semana, el gobierno Berlusconi, que controla 5 de 7 canales de televisión, ha estado a punto del colapso. Lo vamos a conseguir. Si quiere seguir en el gobierno, va a tener que dar marcha atrás al menos en los puntos más sangrantes de su reforma educativa.

Creo que es importante comprender que lo que está sucediendo en Italia no es algo aislado del resto de europa. Aquí en España la reforma de la enseñanza superior lleva el mismo camino, y aunque la primaria y secundaria queden al margen, la universidad está sufriendo una serie de cambios estructurales que van a hacer que olvidemos la universidad tal y como la conocemos. La universidad pública necesita reformas, pero no en esta dirección.
Sin embargo, cabe preguntarse que por qué en España no nos hemos movilizado de esta forma. ¿es qué los estudiantes y profesores italianos son mucho más combativos que los españoles? ¿es que los hermosos envoltorios no nos dejan ver el verdadero cambio que supone la reforma?
Yo creo que no es este el problema. En mi opinión se trata de una cuestión política . En italia esta reforma se ha llevado a cabo bajo el gobierno de Berlusconi, lo que ha hecho que la socialdemocracia entera (aquí PD, que no nos engañemos, representa a la mayoría de los estudiantes) salga a la calle. Por el contrario en España esta reforma se ha realizado bajo el gobierno socialista, lo que impide que muchos jóvenes salgan a la calle, y que la protesta quede asociada a la extrema izquierda estudiantil. Nuevamente, tenemos un ejemplo sobre como las leyes las valoramos según quién las haga y no según su contenido.

4 comentarios:

XIII dijo...

Un post muy interesante. Sobre todo inspirador.

Estaría bien que en España la gente se movilizase como en otros países, pero nos hace falta que nos azucen mucho para ello. Si la actuación no nos duele demasiado y no hay un grupo que presione a la sociedad frente al cambio. Además, en caso de que la sociedad levante el culo del sillón, el entusiasmo y la fuerza no durará demasiado, pronto se olvidará del tema y volverá a sentarse a ver la tele. Un ejemplo claro de esto fue la movilización frente al canon digital.

En cuanto al tema de Bolonia en particular, aquí nos han dorado la píldora más y mejor. Después de tanto tiempo oir hablar de Bolonia no tengo una idea clara de qué es lo que busca y cómo lo pretende conseguir, tengo que admitir que mi conocimiento es muy parcial. ¡Pero si ha habido movimientos informativos todo el rato! Es verdad, pero uno no sabe qué creer porque ninguno de los movimientos informativos era objetivo, siempre se enfocaba desde una perspectiva favorable u opuesta y con la intención de provocar esta reacción en el interesado. Peor que yo está muchísima gente que no tiene la más remota idea de lo que está pasando o que creen que no les incumbe.

Por último, hay quien cree que el desarrollo exponencial del conocimiento terminará por destruir a la humanidad, afortunadamente, nuestros sabios líderes se han dado cuenta y se han propuesto desmantelar la educación para que este proceso autodestructivo se pare.

Otrebla dijo...

Nuestro acomodantismo soez hay que buscarlo en la pasividad de la constitución de una mente combativa. Las cosas nos vienen dadas dicen los deterministas y nosotros a la vista está que nos lo creemos. Muy fugazmente creo que es fruto del individualismo al que estamos abocados. Nadie, generalizando, se preocupa por nadie sobre todo en los nucleos urbanos grandes. ¿Por qué unos vecinos tienen voz para contruir un hospital o unos "pueblerinos" son capaces de desmantelar una fabrica de eliminación de residuos hospitalarios? ¿Tanto cuesta extrapolar esta conducta a la comunidad? Las orejeras de las que disponemos nos vienen impuestas, necesitamos una conciencia combativa. Necesitasmos una corrietne humanista que modifique los principios individualistas. Decía napoleón que apra ganar una guerra hacen falta tres cosas: dinero, dinero y dinero. Nosotros no queremos conquistar tierras sino derechos por lo que necesitaremos: ideas, ideas e ideas.
Lo que me resulta en última instancia más incongruente en que nos movilicemos más los que ya estamos acabando que los que vienen detrás que son a los que les atañe.
Sigo diciendo y seguiré que hacen falta referentes morales en las aulas. Uno no puede acabar la carrera, hacer el cap y dar clase, para memorizar ya están los libros, para aprender se necesita algo más.

XIII dijo...

Es verdad que en el campo de la conquista de derechos necesitamos ideas, pero también necesitamos esfuerzo y gente dispuesta a defender estas ideas. Estos paladines deben de ser capaces de de dotar a la sociedad de un sentimiento de comunidad que les haga moverse como uno y olvidarse de su individualismo. Es el motivo por el que se usa tanto el miedo y la agresión o amenaza para conseguir movilizar a la población, pues nada la une más.

Sueño con serpientes dijo...

Muy interesante discusion.
La verdad que mi intencion con el texto era plantear otra reflexión, pero esta tambien me parece muy conveniente.
Por mi parte no estoy de acuerdo en que la gente no se movilice. Lo que no entiendo del todo es exactamente ante que se moviliza. Me explico con otro ejemplo.
Cuando el PP trato de aprobar la LOU hace casi 7 años mas de 200000 estudiantes salieron a la calle. Lo que yo planteo es que cuando el PSOE ha hecho una reforma en la misma dirección, la cifra de estudiantes que se manifiestan no llega a la decima parte.
Por tanto no creo que nos movilicemos menos que los italianos, sin embargo, respondemos no por lo que nos hacen, sino por quién nos lo hace. Hablando con estudiantes italianos, me han dicho que si esta misma reforma la hace el PD (el partido de veltroni), no se monta ni de coña una como la que se ha preparao. Ellos tambien tienen el mismo problema.