11/8/09

¿Qué es la Inteligencia?

Hace tiempo que no escribo, pero vuelvo al blog con uno de mis temas recurrentes, la inteligencia. En otro artículo comentaba el punto de vista de Marina sobre el objetivo de la inteligencia, ahora me quiero centrar más en el núcleo del concepto.

Estoy leyendo un libro llamado Gimnasia Cerebral de Marilyn Vos Savant, en él se plantea un problema al lector: definir inteligencia en veinte palabras o menos. Me ha costado un buen rato y he tenido que retocar la definición un par de veces después de escribirla, probablemente la revise innumerables veces más pero por ahora tengo lo siguiente: Capacidad para asimilar información existente, crear nueva y curiosidad por obtenerla.

Intentaré explicar un poco el porque de esta definición. Coincido plenamente con la autora del libro y con Marina en que la inteligencia es una capacidad, es decir, es un potencial que puede o no ser aprovechado.

Capacidad para asimilar información, recibir información del medio y ser capaz de obtener conclusiones, dependiendo de la rapidez y de la eficacia de las conclusiones seremos más o menos inteligentes. Por ejemplo, al ver nubarrones correr a guarecerse.

Capacidad para crear nueva información, no sólo alcanzar conclusiones directas sino realizar desarrollos indirectos que puedan considerarse como información nueva. Por ejemplo, de la observación del clima desarrollar el concepto de estaciones o la creación de mitos religiosos.

Por último y tengo que admitir que fue fruto de una revisión, consideré que la inteligencia también consistía en parte en una curiosidad o interés por obtener nuevos datos. Esta también puede ser la parte más atacable de mi definición pues supone que, como la curiosidad se va perdiendo, la mayoría somos muy inteligentes de pequeños y vamos perdiendo la capacidad con los años.

También me gustaría señalar que esta definición puede incluir a ciertos animales superiores como los delfines, esto puede generar rechazo pues hay quien piensa que la inteligencia es una cualidad exclusiva del ser humano y yo no lo tengo claro todavía.

Ahora que he expuesto lo que pienso sobre el tema me gustaría leer alguna opinión al respecto y si alguien se anima que dé una definición de cosecha propia.

3 comentarios:

Otrebla dijo...

"Capacidad para asimilar información existente, crear nueva y curiosidad por obtenerla".

Respecto de las dos primeras proposiciones nada tengo que objetar pero a mi juicio la tercera sobra. Tenemos claro que donde mayor se evidencia la inteligencia -aunque sigo siendo partidario de que es impsible una cuantificación objetiva- es en como tu dices la capacidad para asimilar la inforamción que supone en realidad una capacidad de analisis tanto activa como pasiva. Para mi es en realidad el foco de la proposición. Una vez que comienza a desarrollarse esta capacidad de análisis que será indefinida en el tiempo podrá pasarse al segundo escalon que será la creatividad. Supondrá en este caso la asimilación de conocimientos y capacidad de interpretación -mediando la memoria, claro- para poner en prática lo ya asimilado e interpretado. La "inspiración divina" no sería más que el subconsciente actuando mediante la acumulación de interpretaciones y análisis ya efectuados.

Hasta aquí no es más que una reinterpretación de tus dos primeras proposiciones aunque si bien se suponerpone la primera a la segunda (la primera seria deductiva y la segunda inductiva: pienso en la invención del fuego, me imagino al hommo erectus que de manera fortuita logra fuego, no sabe crearlo pero interpreta o analiza y luego concretiza esas ideas y crea).

Creo que hiciste bien en declinar la curiosidad como parte de tu definición. La curiosidad no sería más que un impulso contingente de la capacidad de análisis y de creación. Objetivizar en la definición la curiosidad supone sesgarla y darle un caracter parcial a la inteligencia. Si bien he dicho que no se puede cuantificar no he discho que no exista objetivamente y es donde entra en juego el otro fenómeno de la inteligencia -con ayuda de STERNBERG, ROBERT J.- y es como lo dejé entrever antes la capacidad de poner en prática la capacidad de análisis (no el hecho de crear en si, ya que la puesta en prática legitimará la invención). Para que quede más claro pienso que la curiosidad puede que sea algo social instituido por la propia capacidad de análisis. Por ejemplo, leer aumenta la curiosidad por las cosas. por ello primero hay que leer y de ahí que no considera parte objetiva de la inteligencia a la curiosidad.

Recapitulando cabría decir de mis opiniones que la inteligencia es la capacidad activa y pasiva de análisis de la inforamción(o externa e interna) a través de la cual se generará información.

XIII dijo...

Gracias por un comentario tan elaborado Otrebla. Como sólo disentimos en cuanto a la curiosidad me ceñiré a ese tema.

La curiosidad es una cualidad bastante olvidada y resulta contraintuitivo incluirla dentro de la inteligencia, tú la enfocas únicamente como el interés por adquirir conocimientos del medio, sin embargo también supone la capacidad experimental, es decir, alterar el medio para conseguir información. Siguiendo con tu ejemplo de los descubridores del fuego, si alguno no hubiese tenido la curiosidad de ver qué pasa si acercas carnea las llamas no habrían aprendido a cocinar. Cada vez estoy más seguro de que no se puede separar de la inteligencia esta cualidad pues si bien es verdad que se ve muy afectada por el medio y la sociedad, no soy capaz de pensar en una persona inteligente que no sea a su vez curiosa.

Anónimo dijo...

Si asumimos que la inteligencia existe como algo innato que difiere de unos a otros...

Richi, yo creo que la curiosidad no sería más que un impulso ajeno a la inteligencia que tiene como consecuencia el mayor uso de esa capacidad.

Es lógico que a mayor inteligencia aumente la curiosidad. Lo es porque la persona inteligente obtiene más recompensas cuando se deja llevar por la pulsión de la curiosidad y, por condicionamiento clásico, el estímulo curiosidad gana más fuerza.

De pequeño abrí un osito que hablaba, quería saber lo que había dentro. Enredé con los cables y dejó de hablar. Si hubiera sido más inteligente podría haber aprendido algo y no habría roto el oso.
Uno es curioso cuando piensa que puede descubrir algo y piensa que puede hacerlo cuando está acostumbrado a hacerlo.

Creo que la definición de inteligencia debe ser "capacidad de comprensión".

Interesante el origen etimológico.

¿Quién es otrebla? tiene un cuadro que me gusta mucho d chagall en un blog.

ale